Es difícil intercambiar pensamientos como peligroso es emplear ciertos términos. Insólitos esos conceptos que intentan engañar a todo el mundo, prometiendo unificar y armonizar la vida sin reconciliar la hostilidad
“La función de la inteligencia en la evolución es perfeccionar, estudiar, escudriñar y exhumar lo desconocido, para develar la única verdad que actúa sobre el entendimiento”
Creando o recreando imágenes que ayudan desde el pasado ha aclarar las funestas razones que retrasan el avance; aparece la invasión de los bárbaros Invasión que siempre hace desaparecer las cosas dejando el sedimento de la ignorancia porque oscurecen el conocimiento. Los destructores no destruyen solos, cuentan con individuos que destruyen por ellos voluntariamente y hasta con placer.
Los destructores que continuamente encuentran razones para justificar la destrucción son fundamentalmente malos, corrompidos y están endurecidos por la maldad. Siempre los “hombres ordinarios con poderes extraordinarios” serán un peligro.
Doblegar a los habitantes humildes que soportan una penosa existencia y que obedecen y se inclinan por el temor y la debilidad que producen la pobreza y la necesidad humillante. Que vanas son las enseñanzas que vuelven mísero al hombre, con esa falsa bondad que los lleva al sufrimiento y la desesperanza.
Ya las moscas zumban pesadamente todas las tardes sin ninguna razón. Bajo la mirada aprobadora de los divinizadores del hombre, de genuflexión rutinaria, sabemos que no será honrado porque la veneración obligada es de difícil aplicación.
Pasa el tiempo y los arboles se balancean por las fuertes tormentas. Sin electricidad, nos acostumbramos a leer con la temblorosa luz de las velas, que iluminan las sombras ...