
La vida comienza como un deseo que nos convierte en embrión. Este, que no es más que azúcar y ácido nucleico (ADN), es dulce como su origen. Lo demás es otra cosa; es lo que viene después…
La intuición y la gnosis permiten ver las cosas con mayor claridad: «La única razón por la que destaca entre ellos, es porque todos los demás son muy malos» dando lugar a ese impulso intolerante de creerse el salvador.
Esto no es irreal o imaginario. Esto se percibe, es sólido y tangible. Pero lo que estamos viendo es la luz de una estrella que ya se apago. Se utilizan pausas, silencios y miradas fijas para controlar el campo de distorsión de la realidad, pero se agoto el modelo de conducta que convertía el encanto en una fuerza llena de astucia, para engatusar e intimidar, alterando la realidad gracias al poder.
A pesar de tener información casi absoluta, no pueden predecir las acciones de la inteligencia colectiva, que si puede en realidad, conjurar esta maldición.