“El tiempo, lento e infinito, va sacando a la luz cuanto está oculto y ocultando las cosas manifiestas” “Porque nada hay que no pueda sobrevenir”
La ocultación suele quedar arrinconada en virtud de lo caprichoso de sus métodos, siendo la curiosidad la actitud para superar lo contemplado, que liberándose así de su influjo, inmuniza contra sus poderes. De ahí ese fondo doliente de tristeza, monotonía y sordera moral, que hace escuchar palabras sin ingenio, y que con saña y prisa combate solo con el afán de vencer.
Hay que saber vencer y también saber ser vencido. Hay que aprender a ver en la derrota una de las caras que puede tomar la vida
Son muchas las angustias que se reflejan en las acciones espectrales, que como livideces de odio ya pertenecen al pasado. Cuando a alguien no le cabe en la cabeza que las cosas pueden cambiar, que los regímenes no son inconmovibles y fijos por toda la eternidad, se congelan,…se petrifican.
“Cuando muera colóquenme en la tumba boca abajo, “porque pronto todas las cosas se pondrán al revés”